2.2.11

Invitación al viaje

¡Mi niña, mi Hermana, piensa en el éxtasis de vivir juntos allí!
De amarnos a voluntad, de amarnos hasta la muerte
¡En esa tierra que es como tú!

La brumosa luz del sol de estos cielos nublados,
Tiene para mi espíritu los encantos, tan misteriosos
De tus ojos traicioneros, brillando a través de las lágrimas.

Allí, todo es orden y belleza;
Lujo, paz y placer.

Relucientes muebles pulidos por el paso de los años
Adornarán nuestro dormitorio.
Las flores más extrañas, mezclarán su aroma
Con la tenue esencia del ámbar.
Los techos ornamentados, los límpidos espejos
El esplendor oriental.
Todo allí le hablará susurrante al alma,
En su suave voz natal.

Allí, todo es orden y belleza;
Lujo, paz y placer.

Ve en los canales, los buques reposar de su ánimo aventurero.
Es para satisfacer tu capricho, que vinieron de los confines de la tierra.
El sol que cae, adorna los campos, los canales, la ciudad entera
con Jacinto y oro.
El mundo cae dormido, bajo su cálido brillo.

Allí todo es orden y belleza.
Lujo, paz y placer.

-Charles Baudelaire